Tengo la sensación de que hay gente de mi círculo cercano que se pregunta: "¿y por qué este wn se enfanatiza tanto con un piloto al que ni siquiera conoció cuando estaba en vida?" o cuando mi propia madre me pregunta: "¿por qué recuerdas tanto a una persona que ya está muerta?", como si asumiera que aún no he podido superar tal pérdida.
Hoy vengo a responder esa duda... por escrito, como me gusta, ya que si lo tuviera que explicar con palabras fácilmente olvidaría algunos detalles que para mí son importantes o tendría dificultades para seguir una línea estrictamente cronológica a la hora de relatar. Pues bien, aquí vamos.
¿Cómo conocí a Ayrton Senna da Silva? Todo se remonta hasta hace unos 7 u 8 años atrás. Tenía unos 11 años, era muy pequeño, demasiado tarde para lo acontecido en 1994, pero en fin... en el PC de mi casa no tenía mucho material como para matar el ocio (juegos u otro pasatiempo, como hacer videos [muahahaha XDD]), anyway, la gran novedad para mí en esos tiempos era la Enciclopedia Encarta 2001 obsequiado por mi abuela (el software, claro está) y me lo pasaba ahí, jugando con las interactividades y leyendo artículos de curioso... hasta que de pronto saltó algo en mi cabeza... un muy vago recuerdo... -"hubo un piloto de carreras que murió en un accidente" fue lo que pensé, no recordaba dónde fue, ni quién fue el que murió, ni cuándo. Entonces le pedí asesoría a mi madre, ella me lo confirmó: "fue Ayrton Senna, un piloto brasilero". De cabeza entonces a la Encarta, busqué el artículo y ahí apareció... vi por primera vez su foto y leí los detalles, por primera vez leía "San Marino", "Imola", "1994", "Tamburello", "Formula 1"... no había mucha información al respecto, pero me di por satisfecho, había conseguido averiguar sobre él, lamentablemente, el afán de la búsqueda llegó hasta allí.
Pasó mucho tiempo, años, para que volviera a recordarlo por el mismo motivo (sospecho que con un morbo escondido, esta vez, intentando dilucidar mayores detalles sobre las circunstancias de su muerte en 1994). Nos remontamos a 2005, no tenía internet en mi casa, así que si quería entretenerme en la red tenía dos opciones: o pagaba por un cyber cercano o pedía una hora en una biblioteca municipal cercana a mi casa donde podía acceder gratuitamente al servicio. Opté en casi todas las ocasiones por la segunda opción y durante ese año frecuenté mucho el lugar, a veces pasaba minutos enteros vagando, o bajando música... hasta que un día volvió a retumbar en mi memoria el nombre: "Ayrton Senna" y empezó todo de nuevo. De cabeza al computador y a googlear sin cesar la combinación de las dos palabras... todo el foco se concentraba en lo ocurrido durante aquel fatídico GP de San Marino, aunque esta vez las preguntas eran otras: "¿en qué parte del circuito ocurrió?", "¿por qué erró en dicha curva?", "¿tuvo alguna reacción antes del choque?", "¿a qué velocidad impactó?" y así, con cada nueva información surgían más dudas y parecía que no saciaba esta vez esa sed de búsqueda, pero se frenaba fácilmente con un aviso: "lo siento, se acabó tu hora". Nada que decir, había otra persona esperando por un computador, cerré todas las ventanas y me fui... hasta ahí llegó la búsqueda.

Hasta este momento todas las aristas que apuntan a Ayrton tienen relación con una demanda de información sobre su muerte, y hasta ese año así lo asimilaba... pero esa necesidad cambiaría radicalmente dos años más tarde.
Así llegamos a 2007, uno de los mejores años que he tenido hasta ahora en mi vida (multifacéticamente hablando). Fue un año muy estable, muy alegre en varios aspectos, conocí a muchas personas importantes y/o que me marcarían bastante durante por lo menos, hasta 2008. En fin, pareciera que las dudas sobre las circunstancias que rodearon el trágico suceso de Ayrton Senna estaban comenzando a desaparecer... en realidad creo que averigué hasta ya no poder más y con ello todo estaba empezando a encajar, pero cuando pensé eso en realidad me percaté que había una arista sin resolver... el por qué había sido tan irrecuperable su pérdida.
Uno de los primeros sites que vi sobre Ayrton fue el de
The S Files, y una imagen que me quedó dando vueltas fue el del cortejo fúnebre a caballo alrededor del féretro del brasilero, montado sobre un camión de bomberos Scania, el 5 de Mayo de 1994, cuando regresó sin vida a su natal y querido Sâo Paulo. Fue una imagen que me hizo pensar en la razón por la que hasta el día de hoy se recuerda con tanta vigencia a Ayrton. Entonces vino otra necesidad... otro deseo...
el saber quién fué Ayrton Senna...
La primera info de rigor, su fecha de nacimiento y lugar, palmareses en las categorías deportivas en las que participó, algo sobre su vida, anécdotas, rivales, él... algo que no se acotara tanto a una fecha y a un suceso específico que marcó el fin de su vida. Entonces recién pude esbozar la dimensión de tal pérdida para la Formula 1 y para el deporte motor mundial en general... la pérdida de un talento en bruto, del amo de la velocidad, el eterno inconformista, el que siempre quería ir una milésima de segundo más rápido... en fin, a partir de ese momento me di cuenta de que Ayrton Senna había sido un verdadero suceso en el deporte motor y su inflaqueable espíritu de lucha me sirvió de inspiración para un difícil año en mi vida: 2008.
Durante los primeros meses del nuevo año, vi muchísimos videos en YouTube sobre él... más que sus increíbles carreras y sus verdaderas hazañas a bordo de un coche, empecé a buscar sobre su vida, sobre el ser humano que lo identificaba, sobre la faceta más íntima que lo rodeaba... su círculo social, amistades, algo así como una biografía. Así me topé con dos cadenas de videos que comencé a ver en las vacaciones de verano de 2008 (aquí en Chile corresponden a los primeros meses del año), partiendo con una biografía inédita en YouTube, hecha en inglés y dividida en varias partes [link 1ra parte:
CLICKEANDO AQUÍ]. Posteriormente, vi otra cadena que acabaría marcando el horizonte que tracé para aquel año... las repercusiones en la televisión brasilera tras la muerte de Ayrton Senna, todo... absolutamente todo... desde el programa Fantástico con un especial sobre la vida del tricampeón de Formula Uno hasta el concierto sinfónico que se realizó en la curva "S do Senna" del circuito José Carlos Pace (Interlagos) en São Paulo, hacia Mayo de 1995. Para mí estas dos cadenas de videos marcaron fuertemente mi modo de enfrentar los acontecimientos que viviría durante prácticamente todo ese año, principalmente por muchos conflictos personales (íntimos) con varias personas y siento que la "otra cara" de la historia de Ayrton que conocí, me ayudó enormemente a crear una faceta más crítica y constructiva en mi punto de vista... puede sonar ridículo, pero es durante ese año donde tal vez valoricé mucho más el haber tomado esa desición, 3 años antes, de comenzar a buscar info sobre él.
Es en ese momento donde admiré cada vez más lo que Ayrton significó en un plano más completo e integral, algo que abarcara no sólo su innegable habilidad como piloto, sino también su faceta como persona... como humano... como cada uno de nosotros, algo que no lo ubicara como deidad, sino como alguien que cometió errores pero siempre trató de mejorarlos. Tal vez por eso nunca ha sido mi política admirar a figuras religiosas como papas o curas o padres... una por la incompatibilidad con mis creencias y otra porque nacieron para servir, no significa que hayan nacido perfectos pero claramente han querido seguir una línea de vida enfocada al servicio hacia los demás. Lo de Ayrton es distinto, es algo que puede ser emulado como una persona o como un profesional, por tanto más próximo a una realidad que abarca un espectro mucho más amplio de personas y que no distingue idiosincracia religiosa.
Bueh... al fin y al cabo, parece ser que no es una opinión tan individual. Hay muchas personas que tal vez se sientan más tocadas cuando escuchan algo sobre él, tal vez hay algún recuerdo importante en sus vidas y/o que se asocie a alguna(s) persona(s) importante(s) y que haya tenido como causal la imagen
del mejor piloto de Formula 1 que haya tenido en toda su historia. Eso es algo que, ya habiéndolo escrito, lo rectifico no como una posiblidad, sino como un hecho.

A tu salud Beco. 16 anos de saudade sem você.